Elegir el aroma que defina la personalidad de tu marca es la manera de definir el recuerdo que los demás guardarán de tu empresa.
A partir de diferentes esencias el perfumista de forma armoniosa crea los aromas que luego darán notoriedad a tu marca, estas creaciones surgen a partir de las normas de la pirámide olfativa siguiendo un minucioso sistema de trabajo compuesto por tres tipos de notas: de cabeza, corazón y fondo.
Notas de cabeza o de salida
Llamamos notas de salida a los aromas que desprende la fragancia durante los primeros 15 minutos al esparcirla sobre el ambiente. Se puede decir que son los olores de presentación del perfume, los cuales suelen ser muy volátiles y ligeros ya que apenas duran unos minutos. Estos aromas suelen tener notas cítricas las cuales aportan frescor e intensidad a la fragancia.
Notas de corazón o de cuerpo
Las notas de corazón forman la esencia del aroma. Define la personalidad del perfume y las notas que le hace único y diferentes unos de otros. Estas notas comienzan a percibirse durante los primeros 15 minutos y perduran en el ambiente pasadas las 6 horas. Son en estos aromas en los que debemos fijar la atención a la hora de seleccionar una fragancia u otra, ya que es la que impregnará nuestra ambiente durante más tiempo.
Notas de fondo o de base
Las notas de fondo ponen el broche final a la identidad del aroma. Las esencias que conforman la base de la pirámide olfativa son generalmente extractos de madera, ámbar, almizcle o especias, consiguiendo con ellas dar profundidad a las fragancias. Comienzan a manifestarse olfativamente pasadas las 2 horas, dando lugar al aroma final y más duradero de la fragancia.
“El accesorio invisible para cualquier ambiente es un perfume”.
– Carolina Herrera
Como recomendación es importante esperar 15 minutos para saber si la fragancia elegida representa la idea que buscamos como representación de nuestra marca.
